Cien caminos en un solo día

Sobre un paisaje suburbano creado por Luciana Lamothe (Mercedes, prov. de Buenos Aires, 1975) para esta exposición, una veintena de artistas argentinos de diferentes contextos e itinerarios expresan el vigor de las propuestas que irrumpieron en el país ante la crisis social, económica y política de 2001. Fue ese un año bisagra en el que una nueva generación de artistas se lanzó a explorar la ciudad en busca de las posibilidades de un arte que pudiera alzarse entre los escombros. La memoria de la ciudad se convirtió en materia, experiencia y relatos para dar cuerpo a una poética del desecho y la contaminación que transforma la violencia en nuevas maneras de habitar el entorno y darle sentido. 

Vandálica y constructiva al mismo tiempo, la obra de Luciana Lamothe funciona como escenario para esta reunión inédita que vincula las diferentes escenas artísticas que se consolidaron en la Argentina durante la primera década del nuevo milenio. La experiencia de 2001 dio lugar a múltiples formas de reparación por medio de la reinvención poética, que esta exposición –cuyo título proviene de una de las canciones que integra Excursiones, el disco de culto que editó Rosario Bléfari junto a su banda Suárez en 1999— pretende poner en valor. Son versiones de la ciudad –entre la destrucción y la reconstrucción– que señalan la rotura y la desarticulación, al tiempo que buscan refugio en el espacio doméstico y los encuentros inesperados en la calle. Desde esta mirada, una explosión puede ser también un estallido de color que transforma, por unos instantes, el paisaje seriado de la ciudad para volver el cielo fucsia y dar a sus cúpulas una composición como la del arcoíris.

Artistas: Nicanor Aráoz, Daniel Basso, Facundo Belén, Belleza y Felicidad Fiorito, Diego Bianchi, Eugenia Calvo, Paula Castro, Cynthia Cohen, Tomás Espina, Mariana Ferrari, Diego Figueroa, Graciela Hasper, Carlos Herrera, Juliana Iriart, Irina Kirchuk, Luciana Lamothe, Martín Legón, Mariana López, Valentina Liernur, Tomás Maglione, Verónica Meloni, Pablo Siquier, Clorindo Testa

Puesta en escena: Luciana Lamothe
Curaduría: Jimena Ferreiro
Coordinación de producción: Iván Rösler
Producción: María Venancio y Martina Estelí

Retrato - Facundo Belén

Hoy conocemos a Facundo Belén, un artista cuyas obras comprenden diversos formatos: la performance, los medios audiovisuales, las esculturas y las instalaciones. La video-performance con la que participa de la exposición Cien caminos en un solo día se titula Limpieza profunda. En ella, el artista se toma de manera literal el concepto de una “limpieza profunda”, un ideal promulgado tanto por el marketing espiritual como por algunas terapias enfocadas en la alimentación. En la obra, Belén ingiere una serie de productos de limpieza para hogares, desde detergente hasta limpiadores de vidrios y de piso. El contraste entre los colores vivos y artificiales de los productos y la piel pálida del artista, así como el creciente y evidente desgaste y malestar que este último va experimentando, componen una imagen incómoda, incluso repulsiva, con la que Belén parodia nuestra relación con los bienes de consumo.

Retrato - Mariana Ferrari

Hoy les presentamos un retrato de la artista Mariana Ferrari (San Miguel de Tucumán, 1975), quien participa de nuestra exposición Cien caminos en un solo día. Distopías urbanas post 2001. Ferrari estudió en la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Tucumán y reside en Buenos Aires desde 2004. Obtuvo numerosas distinciones y becas, y expuso su trabajo, tanto individual como colectivamente, en Argentina, España y Brasil. Uno de los intereses centrales en la práctica artística de Mariana Ferrari es revelar los componentes performáticos de la pintura, a la que piensa menos como un objeto acabado que como un proceso en perpetuo movimiento. Ferrari aborda a la pintura de manera situada, en relación con el entorno específico que ocupa o, como cuenta en este video, como “tomando una situación”. Payasito es el título de la pieza que Ferrari realizó específicamente para nuestra exposición, y para la que trabajó durante quince días en la sala. Se trata de un mural cuyos bordes, tanto espaciales como temporales, se difuminan; una obra al mismo tiempo monumental y liviana, para la que la artista empleó papeles de diario y pinceladas ágiles. La exposición se enfoca en visiones de la ciudad en el arte argentino que sobrevino a los estallidos del año 2001, y contó con una puesta en escena de la artista Luciana Lamothe: una escultura/instalación sinuosa y zigzagueante, realizada en láminas de madera que se pliegan y quiebran para dar lugar a las obras de la exposición. En diálogo tanto con la gran plataforma de Lamothe como con las piezas de otros artistas (muchos de ellos de su misma generación), Mariana Ferrari transforma la pared de la sala en una sucesión de capas que evocan la superficie de un edificio en una ciudad, y sus infinitas historias.

Plano Detalle