Alberdi, residencia para investigadores y creativos, es una usina productiva. Una fábrica intelectual. Una torre, un observatorio. Un faro en un skyline ondulante, tumultuoso y accidentado. Un nuevo hito, en un yacimiento cultural prehistórico de la sociedad cordobesa. Una metrópolis originaria, donde aborígenes comechingones, sanabirones, pampas y ranqueles, devinieron siglos después, en la primer descendencia europea universitaria de Argentina.