La práctica artística de Lucas Di Pascuale (n. 1968, Córdoba, Argentina) se despliega entre los límites del dibujo, la escritura y la lectura; entre la práctica editorial y la docente. Su hacer se ve influenciado por las relaciones entre lo singular y lo plural; entre lo íntimo, lo cotidiano, lo público y lo histórico. En los últimos años, su obra aborda cuestiones relacionadas con la copia y la ausencia del original, nutriéndose muchas veces de aspectos autobiográficos o de biografías de su entorno afectivo en los que la escritura, en ocasiones, funciona como disparador. Di Pascuale se interesa en la técnica como concepto y en cierta idea de lo inacabado a partir de fragmentos que propone su producción. El montaje, otra dimensión importante en su trabajo, funciona a su vez como espacio de memoria y de vacío.