Franco Fasoli, nacido en Buenos Aires en 1981, actualmente reside entre Barcelona y Buenos Aires.
Escenógrafo y muralista, el arte de Fasoli está influenciado tanto por los estudios de cerámica realizados a lo largo de su trayectoria como por su trabajo en la calle como lienzo a finales de los 90.
Es a finales de la década pasada cuando Franco deja atrás el graffiti tradicional para introducir en su temática las vividas contradicciones de las sociedades latinoamericanas, sus rituales y su aparentemente perenne inestabilidad.
Así, una de las características principales de su trabajo es la exploración a nivel material y escala. Desde pinturas de gran formato en el espacio público hasta pequeñas obras en bronce o papel, se puede observar que la oscilación de contextos y recursos son los nutrientes que alimentan su obra.
La tensión entre la cultura dominante global y las subculturas como espacio de resistencia, han sido también materia de estudio a nivel conceptual y en el propio accionar a lo largo de su carrera. Las múltiples formas de identidad tanto individual como colectiva son la columna vertebral de esta influencia sociológica del artista.
Representado a través del conflicto, el enfrentamiento y la yuxtaposición discursiva, Fasoli no pretende responder a la incógnita, sino más bien rediseñar el planteo constantemente, cuestionar al cuestionamiento y volverse a cuestionar a él mismo.