Matías Duville (Buenos Aires, 1974) trabaja con objetos, videos e instalaciones aunque su obra se desarrolla principalmente a partir del dibujo. Sus obras evocan escenas desoladas con atmósferas enrarecidas y atemporales como las que preceden un cataclismo: huracanes, maremotos o situaciones de abandono en el bosque, funcionan como la visión onírica de un explorador errante, como un paisaje mental. Referente local del dibujo, su trabajo se caracteriza por la experimentación de soportes y materiales. Mediante trazos expresivos y procedimientos de cierta brutalidad, impacta la superficie dejando sus huellas en la representación, marcas en las que se mezcla la naturaleza de la materia y el paisaje. La tensión entre opuestos, la mutación y el tiempo son algunos de los temas que recorren sus últimos trabajos.